La mayoría de nosotros busca en este momento poder procesar la marea de información que llega desde los distintos medios nacionales e internacionales, que son recibidos por nuestros dispositivos inteligentes, que escuchamos por la radio o que vemos en la televisión, con imágenes de ciudades muy reconocidas mundialmente abandonadas, acciones para el
control humano, desde los puntos que se reportan con más casos del nuevo coronavirus.
El cine ha jugado con nuestra imaginación muchas veces con estos temas. Hemos visto desastres naturales de proporciones gigantes que arrasan con el planeta, en un sin número de escenarios, tormentas invernales que cubren el mundo con una sabana blanca, lluvias torrenciales que lo inundan todo, donde no hay tierra firme, vientos tempestuosos que hacen parecer todo lo que se encuentra a su paso como partículas de polvo levantadas hacia el cielo, y llegamos a nuestro tema ataques virales que todo lo marchitan, con terribles consecuencias en el humano y su civilización, ahora si estuviéramos en el cine después de ver una película de éstas y a la salida comenta alguien ¿y si fuera cierto?
Y como ya sabemos el escéptico número uno del grupo comenta, es solo una película esto no va a pasar y descubre a su parecer errores presentados en la película que no son posibles en la realidad, otros de espíritu aventurero se ven como el protagonista y divagan con ciertos razonamientos o experiencias personales y métodos de supervivencia, y por supuesto salvan a la mas guapa de la historia donde en medio del desastre descubren el amor arrebatado que transpirán cada uno por sus poros.
Cuando las noticias primero semana a semana reportan los sucesos, después día a día y ahora nos encontramos en hora tras hora, sentir que algo se va acercando, crea una sensación de asecho, de indefensión, se crea polémica con respecto de la respuesta a la emergencia sanitaria mundial, para algunos tardía, donde se ve en sus rostros la preocupación, enojo, para otros la escalada de la emergencia llegará en su momento y tratan de verlo sin perder la perspectiva.
Entonces escuchamos que la Organización Mundial de la Salud (OMS), tras los elevados casos de contagio del nuevo coronavirus a nivel global, ha pasado a calificar de pandemia el brote, suenan las alarmas en nuestro interior, los supermercados presentan ventas de pánico con productos que en la generalidad de las personas son lo importante que debemos tener como reserva en momentos de desabasto y así tratar de conservar la calma en medio de la incertidumbre, como lo vimos en televisión.
La misma conducta en todos lados, no importa tu país, condición, idioma, lo cierto es que en estos momentos te conocerás más profundamente, como te comportas ante la emergencia, y si lo que criticaste de la conducta de otros humanos, vista por las redes es tu comportamiento también, ¿en quienes piensas? ¿Quién te preocupa? ¿Cómo será tu comportamiento? Aprenderemos a valorar lo importante y esencial, este es el momento de estar muy claro.
La estrategia China de contención del virus está dando resultado al parecer, el 15 de marzo del 2020 logran después de meses, reducir drásticamente su propagación, hay esperanza. Italia sigue en la batalla, con controles cada vez más estrictos sobre las regiones, se encuentra en el ojo del huracán y nosotros por comenzar, siempre hemos reconocido después de los sismos de septiembre que hay algo en nuestro interior que ennoblece nuestras actitudes de solidaridad y valentía ante la emergencia. Logramos salir adelante y con una conexión humana solidaria extraordinaria, la sociedad organizada y resiliente, busca en lo profundo de tu ser y encuentra lo necesario, para enfrentar de la mejor manera lo que hoy se avecina.
Ayudemos a los más pequeños a transitar, este tiempo de guardar con responsabilidad, pero también con creatividad desarrollando actividades organizadas en casa.
Cambio y fuera.
EDUARDO SAUCEDO CARMONA / Sin Retorno / Zacatecas, Zac. / 16 de marzo de 2020.
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