Tarde en esta reflexión
porque mi confinamiento
era un clamor en el viento
que sabía de la pasión,
de esta mujer que es prisión
y es amor y es mi sustento.
Pero tu encarcelamiento
es triple causa viral
es soledad animal
y es inmolar el tormento.
No solo tú me afliccionas
hay quien muere en los conventos
Y callan sus virulentos
designios, no te perdonas
que si Dios quiere le abonas
tu perdida en cuerpo y alma
si el virus te da la calma
es por designio divino
que te señale el camino
y allá en su reino, te ensalmas.
Contigo siento empatía
médico, enfermera y todos
cubiertos hasta los modos
de andar en esta utopía,
donde no has de ver el día
en el que el virus absuelva
tu dedicación y vuelva
a brotar enrabietado
y ya tu estés intubado
sin nadie, quien nos absuelva.
Ochenta y cinco son tantos
como quieras tu pensar
más no quiero imaginar
de Macondo sus encantos
si esos aires como espantos
nos vienen a dar las llaves,
vuelve y canta como sabes
mi afecto Caifán mayor
que todo sea un pormenor
de salud, mi Oscar Chávez.
@JosAntonioParg2
JOSÉ ANTONIO PARGA / Décimas del Tapabocas / San Luis Potosí, S.L.P. / Abril 30 del 2020.
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