Que la dimisión de Carlos Romero Deschamps al Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) se haya logrado de manera pacífica, celebró el presidente Andrés Manuel López Obrador durante la “mañanera” y estimó que la renuncia marca el inicio de una nueva etapa.
López Obrador consideró que hay una nueva realidad, que se tendrá que respetar a los trabajadores para que de manera libre y democrática elijan a sus representantes, y que el gobierno debe ser responsable y cuidadoso para no tener injerencia en la vida interna de los sindicatos.
“No debe haber sindicatos de Estado. El gobierno no debe poner o quitar a líderes sindicales como era la mala costumbre. Tienen que ser los trabajadores, tiene que haber libertad y democracia sindical, así como transparencia y honestidad en el manejo de fondos y en las cuotas de los trabajadores”, dijo.
López Obrador expresó que no se debe permitir la corrupción y subrayó que no es posible que los dirigentes sindicales vivan colmados de atenciones y privilegios. “Eso es inmoral, ¿cómo un dirigente de trabajadores va a ser al mismo tiempo un potentado? ¿De dónde sale ese dinero?”, cuestionó.
Manifestó que no se le debe tener miedo a los trabajadores, pues ellos saben muy bien lo que les conviene, y llamó a que la renuncia de Romero Deschamps genere elecciones limpias y libres en el STPRM.
“Estamos comenzando una etapa nueva, nada de antidemocracia. Celebro lo que pasó ayer y que además se haya logrado de manera pacífica, porque en otros casos hay hasta violencia”, acotó.
El mandatario federal expresó que así como lo que sucedió con la renuncia de Eduardo Medina Mora a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), el caso de Romero Deschamps implica que “si tienen cuentas pendientes o hay denuncias”, lo mejor es no involucrar a la institución y hacerse a un lado, pedir licencia o renunciar para enfrentar el tema personal en la Fiscalía General de la República (FGR). “Qué bien que se están dando estas cosas”, finalizó.
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