Como esta noche lo despediré trabajando, me adelanto para desearos a todos un mucho mejor 2021, en el que la esperanza se agrande y podamos recuperar la libertad perdida. Un 2021 en el que podamos respirar, viajar, soñar y ser sin grandes limitaciones. Un año en el que la salud nos sonría física, mental y emocionalmente. Un año en el que valoremos más las cosas simples y nos podamos abrazar sin miedos.
Personalmente, este 2020 ha supuesto para mí el ver como mis sueños se escapaban de entre las manos… Tuve que aplazar todo aquello por lo que había luchado durante mucho, mucho tiempo, pero eso también me ha servido para destapar la venda de mis ojos, mirar en mi inmediata realidad y centrarme en las necesidades de mi familia, de mis hijos.
Este 2020 lo empecé despidiendo a un ser muy querido para mí en el día de mi cumpleaños, (tal vez fue un augurio de lo que vendría después), pero jamás me imaginé que este año marcaría la vida del mundo y lograría paralizarlo todo.
Durante los primeros meses fui muy feliz con mi nuevo trabajo. Descubrí a lo que quiero dedicarme y desarrollé un proyecto que en cuanto pueda llevaré a cabo. Aprendí intensamente como nunca en toda mi vida.
Pero todo tuvo su fin y llegaron nuevos principios. Dejé atrás personas y momentos, me reconvertí.
He comprendido que lo primordial es que mis hijos, mi familia y las personas a las que quiero estén bien y sean felices. Poder sentarme con mis padres y hermanos sin miedo cuando nos reunimos, abrazarnos y demostrarnos lo mucho que nos queremos…. Todo lo demás viene después. He puesto en orden las prioridades, y eso es bueno.
Despediré este 2020 sin poder estar con los míos, ni brindar, ni tomar las uvas por primera vez en muchos años… pero estaré acompañando a aquellos que están sufriendo los efectos de esta pandemia y tampoco pueden estar con sus allegados, y eso, le da sentido a este año que acaba y al nuevo 2021 que ya llega.
Os deseo mucha felicidad, cada cual a su manera… y que valoremos lo esencial de la vida, que nos reencontremos y aprovechemos cada momento con la intensidad que corresponda, pero que vivamos mientras se nos conceda este regalo de estar aquí.
BEGOÑA DIAZ / Literatura / Vendrell, España / Diciembre 31 de 2020.
