¿Un mundo en crisis? Gobernanza global y un regreso al viejo orden mundial

Estudiar las relaciones internacionales nunca había sido tan embrollado como ahora. ¿Por qué lo digo? Citando el título de este artículo, ¿Estamos viviendo una etapa de crisis mundial? Pues nos encontramos con eventos confusos en el escenario internacional, que, por un lado, sugieren que hay una multiplicidad de actores que tienen poder de persuadir, decidir y generar presión en la tarea de resolver fenómenos como la crisis climática, el fenómeno migratorio, los derechos humanos, la proliferación de armas, el terrorismo y un largo etcétera.  Estos actores no son precisamente los estados, aunque estos últimos siguen siendo los más prominentes. Estos nuevos actores, que aún sigue en tela de juicio su posición dentro del derecho internacional, pueden ser desde empresas transnacionales, ONGs, corporativos hasta las recientes “ciudades globales”. Todos estos han tomado un papel de responsabilidad en los asuntos contenidos en la agenda internacional y si bien, los estados siguen siendo el actor más relevante, en nada detiene la acción de estos otros.

Por otro lado, en el mismo ejercicio de análisis del panorama internacional, se percibe un regreso al viejo orden mundial; aquel donde los estados son escépticos, nacionalistas y prefieren el uso de la acción coercitiva cuando se trata de resolver asuntos. Les gusta cooperar… pero en lo que les conviene. Ejemplos sobran al respecto, desde el 2016 con la candidatura por el actual presidente Trump que a raíz de su discurso “America First” ganó las elecciones después de 8 años de periodo demócrata; en el mismo año con el denominado Brexit, decisión del Reino Unido de retirarse de aquel sueño fundado en la cooperación entre estados; que aquello que era una simple manifestación, se convirtió en una realidad el pasado 31 de enero cuando se consumó por completo la decisión. Con un Brasil ultraderechista a cargo de Bolsonaro, cuya narrativa excluye por completo las causas ambientales, el multilateralismo y más. Estos y más eventos solo sugieren que los mandatarios están revisando la manera en que toman decisiones, resuelven conflictos y llevan sus relaciones diplomáticas.

Este mismo efecto se está replicando en varias partes del mundo, desde medio oriente con las rupturas a acuerdos de control nuclear hasta América Latina donde el debate entre regímenes de izquierda y derecha parece presentar ruptura de relaciones entre estados. Mientras estos eventos suceden, las “ciudades globales”, transnacionales y ONGs parecen hacer la tarea de los países en cuanto a los asuntos urgentes como el control de la crisis ambiental… y no podríamos estar más confundidos.

En un mundo que está cada vez más conectado, que es más dependiente, que donde lo que acontece en algún rincón a miles de km puede tener consecuencias que afecten al otro extremo… en un mundo donde hay crisis ambientales, guerras, en el cual se convive con distintos regímenes en una misma región, donde entran en juicio las democracias y donde la pobreza y la marginación social siguen siendo una constante. Ante esta perplejidad política será interesante analizar el rumbo que tomará el orden mundial. Que, ante la disyuntiva de la crisis climática, tal vez podremos presenciar estabilidad con los esfuerzos hechos por los estados y paralelamente por los de estos nuevos actores; pues en la resolución de fenómenos internacionales hay mucho que hacer y la coordinación puede ser clave.

Contacto:

Linkedin: www.linkedin.com/in/tania-verónica-garcía-rizo-775a9617a

Twitter: @rizotania

TANIA GARCÍA / El punto medio / San Luis Potosí, S.L.P. / Febrero 09 de 2020.

Be the first to comment

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.