“No me Cabe un Alfiler por el Chiquito”: Torres Corzo.

“Victoria es impopular, tiene a toda la gente en contra, no ganaría una elección”.

De Eduardo Alvarado Izunza.

“No me Cabe un Alfiler por el Chiquito”. Con esa forma tan poco refinada se expresó el ex gobernador Teófilo Torres Corzo, quien paradójicamente siempre viste con finas telas, para expresar su fingido miedo por ser designado como candidato a senador por el PRI en el Estado de San Luis Potosí.

Su error –dijo durante una conversación conmigo el pasado lunes en su despacho– fue haber aceptado una propuesta del Dr. Fernando Toranzo Fernández, gobernador de esta entidad federativa, de incluirlo en una lista con propuestas suyas a la dirigencia nacional del PRI.

–Le dije que sí, porque a mí me gusta que me mencionen para cualquier cosa. Hasta para una elección de mesa directiva de los Rotarios. Es mi naturaleza. Pero no pensé que el gobernador fuera a ponerme en el primer lugar de esa lista y ahora no me cabe un alfiler por el chiquito del miedo de perder todo lo que tengo.

Quien escribe acudió a su despacho a una conversación a petición suya, después de haber publicado una nota en Facebook sobre su posible postulación como candidato del PRI al Senado de la República, nota que circuló profusamente en redes sociales (ver: http://www.facebook.com/photo.php?fbid=2470413999845&set=a.1450413780477.2066342.1237207157&type=3&theater).

Según me dijo el ex gobernador él perdería, lejos de ganar, con esa nominación.

–No sólo dejaría mis negocios, que son muy prósperos, sino que también abandonaría a mi familia, a mis nietos, a mis hijas y a mi esposa Carmenchu.

Además no estaría seguro de ganar. Si mi compañera de fórmula es Victoria (alcalde del municipio de San Luis Potosí) vamos a perder, porque es muy impopular y tiene a toda la gente encima.

Quizás si él viviera de la política, como son los casos de Carlos Jiménez Macías, o de los ex gobernadores Horacio Sánchez Unzueta o Fernando Silva Nieto –“quien anda muy jodido”–, entonces andaría feliz. Y menos aún cuando el PRI no le daría sino una cantidad miserable de dinero para su campaña.

Otros hechos –según sus palabras– también lo tienen espantado, como son que la encuestadora Mitofsky lo haya ubicado en el primer lugar de las preferencias electorales en San Luis Potosí y a que no podría decirle que no a Enrique Peña Nieto –“el presidente”– si éste se lo pide.

–A mí me gusta tener influencia, me gusta que el gobernador me reciba una o dos veces al mes y opinar en tres o cuatro cosas. Ahora los Torres Corzo manejamos hasta a las organizaciones empresariales. El gobernador Toranzo estaba equivocado al hacer cosas solamente para los pobres. Se le habían olvidado los curros y tu sabes que los ricos somos quienes mandamos. Pero hasta ahí. Ahora no sabré cómo decirles que no quiero ser, porque puedo perder todo lo que tengo.

Por eso, a Teófilo Torres Corzo no le cabe un alfiler por el chiquito –como él mismo dice– del susto que le ha dado saber que fue anotado por el gobernador Fernando Toranzo Fernández en el primer lugar de su lista de propuestas de candidatos a la dirigencia nacional del PRI; y porque Peña Nieto puede pedírselo personalmente.

–¿Cómo le diría que no al presidente?

PD.: Por “el chiquito” se refiere al ano, según una expresión prosaica empleada por algunos sectores de la población mexicana; y por la presunta encuesta de Mitofsky en realidad se refiere a la firma Pentamarketing de Jaime Narváez Piña, cuyos trabajos son de muy dudosa objetividad.