Discapacidad

Elena Velázquez

Definición de la palabra discapacidad.

Falta o limitación de alguna facultad física o mental que imposibilita o dificulta el desarrollo normal de la actividad de una persona.

La palabra discapacidad encierra tantas cosas, tantos sentimientos, tanta profundidad, retos, fracasos, a la vez alegrías y tristezas al mismo tiempo.

Discapacidad engloba todo un mundo paralelo al de los normales, pero por suerte o desgracia son mundos que no se pueden separar.

Discapacidad.

Es el discapacitado y todo su entorno que le rodea para bien o para mal.

La discapacidad son sentimientos o etapas por las que atraviesa la persona una vez que es consciente de que tiene una o varias limitantes con las cuales tendrá que aprender a vivir durante toda su vida.

Estos sentimientos o etapas son tristeza, soledad, frustración, dolor, incertidumbre, depresión, pero también hay sentimientos positivos como son: enojo positivo, rebeldía positiva, determinación, triunfo empeño, valor y arrojó; A continuación, se va a explicar al lector porque y cuando pasa un discapacitado por cada sentimiento.

Tristeza: es cuando se deja de ser niño y se pierde la inocencia y se entiende que la realidad de su cuerpo será algo que lo acompañará por el resto de su vida.

Soledad: este sentimiento se da en varias etapas de la vida del discapacitado principalmente cuando se va a una escuela o a un centro laboral porque de una u otra manera se ve excluido, ya sea porque camina lento, porque no ve, por muchas cuestiones no lo incluyen, en el momento de salir a almorzar, por ejemplo, son situaciones que aíslan y producen la soledad.

Frustración: esto se da en el momento en que se acepta que la discapacidad no permite realizar ciertas cosas, entonces se siente frustración por no poder hacerlas.

Dolor: el dolor se da cuando comprendes que nada puedes hacer por evitar tu soledad tu aislamiento y que solo tienes que aceptar tu realidad.

Incertidumbre: esta sale cuando no sabes qué actitud debes tomar para enfrentar lo que estás pasando y si podrás salir de ese lugar oscuro en el que te sientes.

Depresión: una vez que eres consciente de todo lo anterior llega la depresión porque te das cuenta de que es una realidad en tu vida y así será para siempre, el discapacitado que no tiene el apoyo o que no tiene la habilidad de entender todo lo anterior se hunde en la depresión.

A continuación, analizaremos los sentimientos positivos y cómo es que llegan al discapacitado.

Enojo positivo: este se produce cuando comprendes que tu realidad te va a acompañar siempre y que debes aprender a vivir con ella, a luchar con ella y de ahí sale el coraje, el enojo para salir adelante.

Rebeldía positiva: La rebeldía se origina cuando la familia por querer proteger al discapacitado no le permiten ser independiente, es entonces cuando se requiere ser rebelde para ser  autosuficiente.

Determinación: el discapacitado debe tener una voluntad férrea y mucha determinación en las decisiones que emprenda para que su familia lo apoye y logre sus objetivos.

Triunfo: una vez pasados todos los sentimientos anteriores se puede lograr el triunfo, la estabilidad, la realización personal gracias al esfuerzo y voluntad.

Empeño: se requiere de mucho empeño para lograr alcanzar las metas y ese es un punto muy importante para un discapacitado.

Valor: el valor es fundamental para poder enfrentar el mundo solo o acompañado, pero se necesita de mucha determinación y valor para conseguirlo.

Arrojo: quien no tiene arrojo no llega a ningún lado y menos un discapacitado, se necesita tenerlo para conseguir su independencia.

El mundo de un discapacitado está rodeado de todos estos sentimientos encontrados buenos y malos, tiene que enfrentar su realidad y que su familia, sus padres, sus hermanos, sus familiares  más cercanos, sus amigos, hasta sus mismos compañeros de trabajo quieran sobre protegerlo por amor, por lástima, por compasión, por el sentimiento que se quiera utilizar, pero dicen pobrecito  no puede, solo realmente al hacer esto se hace un mal a la persona, porque lo hacen dependiente.

Él es tan capaz de realizar lo mismo que una persona normal, lo único que se requiere es tener la oportunidad de demostrarlo, el mundo de un discapacitado debe ser libre, sin barreras, sin muros y cadenas, sin nada que lo ate, el mundo de un discapacitado debe brindar confianza, debe brindar esperanza, debe brindar estabilidad para que el discapacitado pueda realizarse y ser útil a la sociedad y al mundo, que es el fin de todo ser humano.

No queremos ser como un animalito que nos tengan que arrimar todo, queremos ser como los mejores hombres que han luchado por nuestro México y que han brindado triunfos al país, eso es lo que desea un discapacitado, ser útil y productivo para el mundo, para su país, para su comunidad, para su entorno, para su familia, para  sí mismo, no ser una carga, ser alguien útil, por favor bríndenos esa oportunidad que todos merecemos por igual, merecemos la igualdad porque somos iguales a cualquiera.

En la vida de una persona con discapacidad, tiene por lo general, un lugar preponderante el aspecto religioso. Anteriormente de manera absurda se decía que eran castigos divinos por supuestos malos comportamientos de sus progenitores.

Afortunadamente esa idea ha ido cambiando y tiende a desaparecer; sin embargo, lo que se da con frecuencia es el fervor religioso, se cuenta de una persona con discapacidad motriz, es decir, se trasladaba de un lugar a otro con  muletas, acudía todos los días a la Basílica de la Virgen de Guadalupe a rogar porque volviera a la normalidad, así por meses y meses, hasta que un día decidió no ir más, se dijo a sí mismo, esto es irreversible y haré mi vida en forma normal y no me quedare a esperar un milagro.

Después de eso estudió artes, se graduó de maestro y luego fue catedrático universitario, de haber seguido yendo a la Basílica, ahí seguiría y nos hubiéramos perdido de un artista, un maestro y un ser humano valeroso, nada más.

Elena Velázquez Lobatón / Elena de Troya / Chilpancingo, Guerrero. México / Junio 05 de 2023.