Resultó de gran trascendencia la reunión que encabezaron el presidente Enrique Peña Nieto y el líder nacional del PRI este fin de semana en la toma de protesta de los nuevos integrantes del Consejo Político Nacional, órgano que será el que convoque a la Asamblea Nacional que defina y formalice la candidatura del abanderado priista a la Presidencia de la República en el 2018. La instalación del VI Consejo Político Nacional para el periodo 2016-2019 sirvió de marco para las definiciones políticas que hizo el mandatario, de gran peso en este momento para el Partido y para la situación política del país.
El Presidente se refirió a las pasadas elecciones del 2016, mismas que representaron una gran lección para el Revolucionario Institucional, porque –dijo– siempre debemos encabezar gobiernos con resultados positivos y ejercer las funciones con transparencia e integridad.
Llamó a los compañeros de Partido a cerrar filas en este momento; mantener la unidad partidista; desterrar las visiones derrotistas; desmentir los supuestos pactos políticos y a salir a convencer a la sociedad para ganar las elecciones de 2017 y de 2018. Llamó también a dejar de lado las voces que pretenden confundir y engañar de falsos acuerdos electorales; a superar el discurso de la división que alienta el encono, cuando el PRI ha sido históricamente promotor de la unidad.
De tal manera que considera las próximas elecciones como indispensables para garantizar la continuidad; lo que está en juego, puntualizó, es el futuro del país: lo que tenemos que defender es lo ya alcanzado, lo que ya construimos los mexicanos. En particular, sobre el 2018 dijo claramente que primero será el programa y después los nombres; dejemos para otros partidos las postulaciones anticipadas, enfatizó.
El discurso fue contundente: reprobó los casos de corrupción de algunos priistas con responsabilidad de gobierno, quienes, subrayó, han traicionado al Partido, a México y han transgredido la ley, por lo que pagarán las consecuencias. Aclaró que no por ello se debe juzgar a todo el PRI, y celebró que se hayan integrado comisiones anticorrupción en su interior para señalar los actos ilícitos y desterrar el encubrimiento y la impunidad.
El presidente Peña Nieto se manifestó orgullosamente priista y exaltó su pertenencia a este Partido que ha construido las instituciones de nuestro país, que es el responsable de las reformas estructurales más profundas de los tiempos recientes, y que es el mejor partido de México. El mandatario asumió expresamente los costos políticos de los grandes cambios y convocó a demostrar “de qué está hecho el Partido”, al seguir construyendo el proyecto de nación.
Mencionó que el mundo ha vivido transformaciones radicales que han derivado en inconformidades de los sectores menos beneficiados y que han llegado a expresarse electoralmente y cuyos resultados no corresponden a los pronósticos sobre las preferencias políticas de la población. Previno, por tanto, sobre los riesgos de los viejos modelos políticos que podrían retornar al país.
Por todo lo anterior, el Presidente llamó a las dirigencias del Partido a trabajar para definir el proyecto que en los próximos años servirá para continuar conduciendo los destinos de México.
En su intervención, el líder nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, convocó a la unidad nacional ante los desafíos en que se encuentra el país para afrontar la nueva administración de los Estados Unidos.
Llamó a construir la agenda de México y a instrumentar una estrategia de cohesión y de unidad nacional que promueva los intereses de la nación; la defensa de los connacionales en el exterior y los intereses económicos y comerciales de nuestro país; a alentar a las organizaciones políticas de los mexicanos que viven en el exterior; a promover la diplomacia parlamentaria con senadores y diputados frente a sus homólogos de EU; acercarse a la ciudadanía y escuchar sus demandas; así como a cuidar a la militancia del Partido mediante procesos de elección de candidatos honorables y con arraigo.
Convocó, finalmente, a trabajar en pro de la Vigésima Segunda Asamblea Nacional del año próximo, a prepararse para ganar las elecciones de 2017 y construir el camino para triunfar en las del 2018.
La convocatoria a los priistas es ahora por la unidad nacional, unidad en la que participen todas las fuerzas políticas, los sectores productivos y todos los grupos sociales. Es la hora, concluyó Ochoa Reza.
*Presidente del Instituto de Capacitación y Desarrollo Político (ICADEP) Nacional.
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