Por José Gutiérrez Guillén.
El Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Institucional, en los últimos años ha mandado delegados a San Luis Potosí, que a ese instituto político no lo han beneficiado en nada. Al parecer al CEN del PRI poco les interesa el estado de SLP, que solamente manda gente de otros estados a seguir cobrando un buen salario, pero no han aportado nada a la política priísta de los potosinos.
Con una ocasión que me tocó entrevistar a Alejandro Lambretón Narro, me bastó para conocer la “Inteligencia” De ese señor, y muy bueno para el tricolor que se haya ido este “personaje” que no aportó nada, vamos…ni sus comentarios y opiniones sirvieron para nada al PRI estatal.
Recordaré a delegados de categoría como Dulce María Sauri Riancho, que luego de estar en San Luis Potosí como delegada, fue gobernadora del estado de Yucatán. Un caballero como le decía de las cuatro A, es donde quiera que está Alberto Andrés Alvarado Aramburu, a quien, desafortunadamente un delincuente al buscar robarle el reloj Rolex, lo asesino en la Ciudad de México. Don cuádruple “A”, fue gobernador de su natal Baja California Sur.
Otro gran personaje fue el ex gobernador de Zacatecas, José Guadalupe Cervantes Corona, que fue un caballero en el periodo que le tocó ser delegado y con sus amplios conocimientos enseñar en aquel tiempo a los jóvenes priístas, que por cierto son muy pocos los que han llegado a la gloria de un cargo, en donde solo ocasionados o “aprovechadores” han logrado sin merecerlo el cargo de diputado estatal, y que por cierto por la vía plurinominal y nada han aportado de beneficio al ciudadano, pero para ellos, todo.
Otro gran amigo para un servidor es el poblano Víctor Hugo Islas Hernández, quien muy joven llegó a San Luis como delegado, y algo que le quedó a deber el PRI fue la gubernatura, el heroico estado que el 5 de mayo próximo recordará una de las vivencias más hermosas de la historia mundial, cuando México le ganó al mejor ejército del mundo, el de Francia, la batalla en Puebla.
También el oaxaqueño Julio Esponda, realizó una buena labor como delegado,. Y de quien ni quisiera acordarme es del hidalguense que de eso no tiene nada, Jesús Murillo Karam, que durante su gestión los jóvenes de la Corriente Crítica encabezado por Ricardo Moreno Barajas y Raúl Ruiz, le tomaron el edificio, cuestión que molestó mucho a ese señor “calvito” que, luego en venganza, vendió todas las candidaturas de los 58 municipios de la entidad potosina, así como las diputaciones, millones que le sirvieron para después ser gobernador del estado de Hidalgo, que nunca hizo nada por esa gente.
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